Por fin tienes esa cita que llevabas tiempo deseando y ¡estás de los nervios! No quieres empezar a lo loco, reservando en un restaurante por todo lo alto. Mejor ir conociéndose poco a poco. Así que decides optar por algo más “tranqui” como invitarle a una caña o a un vinito. Pero, de repente llega la hora de pagar y ¡no! No llevas nada suelto.
Hace siglos que dejaste el monedero junto al resto de estuches que ya no usas. Estás tan acostumbrado a pagar con la tarjeta o con el móvil, que para ti llevar la cartera está totalmente demodé.
¿Y ahora qué? ¿Te arriesgarás a sacar la tarjeta y a escuchar la fatídica frase de “Lo siento, solo aceptamos efectivo”? Como sabemos que solo hay una oportunidad para causar una perfecta primera impresión, te explicamos las “poco probables” situaciones que se podrían dar a la hora de pagar con tu tarjeta, para que te adelantes.
Sí, los comercios pueden imponer un mínimo para pagar con tarjeta
A no ser que cambies la idea de “caña y vinito” por un loco fast food, no deberías preocuparte por esta nimiedad. Además, si la cosa sale bien “una caña y un vinito” deberían convertirse en dos y, hasta tres. Pero por si acaso, fíjate cuando entres en todas esas pequeñas pegatinas o carteles que suelen encontrarse en la entrada. Ahí, (o en cualquier otro lugar visible del establecimiento), deberían indicarte cuál es la cantidad mínima libremente fijada por el comercio.
En el caso de que no haya nada, tendrás derecho a pagar con la tarjeta, sea la cantidad que sea.
Hay algunos “pocos” comercios que no aceptan pagos con la tarjeta
Dice la leyenda que existen ciertos señores, dueños de sus negocios, que eligen por voluntad propia no disponer de un datáfono. Pero seamos realistas, ¿quién, en plena era del Internet de las Cosas, no va a dar la opción de pagar con tarjeta? Eso sí, si por circunstancias de la vida, acabáis improvisando vuestra primera cita en la Taberna Paquito & Cía. llega un poquito antes y pregunta en la barra si puedes pagar con tarjeta.
Si no, estarás a tiempo para sacar algo de dinero en un cajero cercano.
Cuidado con los recargos al pagar con tarjeta, ¡no es legal!
Y por último, otra cosa que no deberías pasar por alto, por muy en las nubes que estés mirando a tu cita, es que si después de haber preguntado, te confirman que tienen datáfono y que no pasa nada si pagas con la tarjeta, te encuentras con un recargo en la cuenta. Las comisiones por pagar con tarjeta son ilegales desde septiembre de 2014.
Históricamente los comercios se negaban a aceptar tarjetas por las altas comisiones que suponían con respecto al beneficio de su uso. Pero hoy, no aceptarlas supone asumir unas pérdidas absurdas tanto en las ventas, como en la fidelidad con sus clientes.
Así que, ahora que conoces todas las situaciones que pueden darse en tu cita perfecta a la hora de pagar con tarjeta, ¿seguirás haciendo caso a tu madre y llevarás cash “por si las moscas” o simplemente te centrarás en no atragantarte con los huesos de las aceitunas mientras tratas de conquistar a tu deseada cita?