Se conoce coloquialmente como el oro líquido y no es para menos. Llenar el depósito del coche a veces resulta caro. Otras veces es más barato. No existe un término medio, de ahí que parezca que los precios estén en una constante montaña rusa. Los precios de la gasolina está sujetos al crudo, que es el producto a través del cual se hace la gasolina, es decir, es la gasolina que pone en marcha a la propia gasolina ¡Valga la redundancia! El precio de la gasolina depende del crudo, pero también del barril de Brent, que es la referencia en los mercados europeos.
Dicho esto, ¿te preguntarás por qué el coste de la gasolina sube y baja sin tener una lógica exacta? No existe una persona ni una fuerza del más allá que decida fijar un día un precio y otro día otro, sino que existen muchas razones:
- La oferta y la demanda. Lo que nos cuesta la gasolina funciona como un mercado normal y corriente en el que hay quien vende y compra gasolina.
- Los conflictos bélicos aumentan su precio.
- La especulación financiera, difícil de prever.
- La subida y la bajada de las divisas: recuerda, el dólar sigue mandando sobre el euro.
Al final, los precios de la gasolina no paran de subir y bajar. Una y otra vez. Pero no siempre caen lo que nos gustaría a todos. Lo lógico es que si baja el crudo, lo haga la gasolina en la misma proporción, ¿verdad? Nuestro bolsillo lo agradecería, ¡y mucho! Lo sentimos, en la práctica no es así. El motivo no es otro que los impuestos a los que está sujeta. Y es que la mitad del precio son solo impuestos, al menos en España.
Así, de entrada el precio de la gasolina tiene que soportar el IVA (21%) y el Impuesto Especial de Hidrocarburos (IEH), que tiene un coste absoluto y fijo. Y por si fuera poco hay que añadir los costes de distribución. Todo eso hizo que el año pasado el 58% del precio final de la gasolina y el 55,5% del precio del gasóleo fuesen impuestos. “Y no lo decimos nosotros, lo dice la Asociación Española de Operadores de Productos Petrolíferos. Eso quiere decir que en realidad un litro de gasolina podría costarnos 0,55 euros. ¡¿0,55 euros?! ¡Todo un lujo al alcance de cualquiera si no fuera por los impuestos!
Además, dependiendo de la comunidad de España en la que estés será más barato o más caro, porque estos impuestos también varían. Además, si hay mucha competencia entre gasolineras también será más barato repostar. De ahí que ahora estén de moda las gasolineras low cost.
Ahora todo encaja, ¿verdad?. El precio de la gasolina depende de muchos factores. Prever cuando el coste de la gasolina va a ser más bajo es complicado, por eso, llenar el depósito cuando baje es una solución para ahorrar. ¡No esperes a que baje siempre!